América Latina alberga una gran cantidad de economías de rápido crecimiento de diferentes escalas, niveles de resiliencia y contextos sociales. Lo que une a los líderes locales es su firme compromiso de superar otro ciclo de volatilidad. En 2022, el 95 % se siente más seguro de su capacidad para innovar en comparación con antes de la pandemia, y está listo para buscar la innovación a mayor velocidad. 

El ‘desarrollo de nuevos productos y servicios’ y el ‘compromiso del cliente’ son las dos áreas focales de innovación para el 50% de los encuestados. La tecnología ocupa un cercano tercer lugar. Históricamente, la región siempre ha estado bien posicionada para servir como socio de las empresas de América del Norte. A medida que la experiencia del cliente (CX) se convierte en un fuerte impulsor de compras entre los especialistas en marketing, los líderes de LATAM se esfuerzan por establecer el nuevo estándar. Las tecnologías digitales emergentes, el nuevo conocimiento de los clientes y los comentarios de los clientes se consideran facilitadores centrales para la innovación que las empresas locales podrían usar para hacer que sus ofertas sean más competitivas para los socios regionales e internacionales. 

A pesar de las fortalezas recién descubiertas y el compromiso con la innovación, los líderes de LATAM están reprimidos tanto por barreras internas, principalmente en torno a la cultura organizacional y el financiamiento, como por riesgos macroeconómicos. La región aún está rezagada en la escala de recuperación, mientras que nuevos riesgos desafían la trayectoria de crecimiento ascendente. Los líderes están casi igualmente preocupados por las crecientes tasas de inflación, la inestabilidad social y los riesgos fiscales. Aunque pocos se sienten desfasados. Por el contrario, el 97% está de acuerdo en que la disrupción del mercado los motiva a innovar con un vigor aún mayor.